Este proyecto plantea la reforma de un edificio construido en 2001 para adaptarlo a nuevas necesidades funcionales, pero también para mejorar su eficiencia energética, su confort térmico y en general la calidad estancia de las personas que trabajan en él. Las estrategias relativas a la construcción sostenible se pueden resumir en estos puntos:
- Integración de una instalación fotovoltaica de 100 kW que, además de producir electricidad suficiente para cubrir la demanda del edificio, filtra la radiación solar y recoge el agua de lluvia.
- Gestión sostenible del agua con el objetivo de lograr un consumo cero de agua no potable, recogiendo pluviales y agua de condensación de climatización.
- Optimización del uso del sol, aprovechando la iluminación natural, pero a la vez filtrando el exceso de radiación solar para evitar sobrecalentamiento.
- Creación de un microclima en el patio interior, mediante un jardín de especies autóctonas de ecosistema mediterráneo de ribera, convirtiéndolo en el corazón bioclimático del edificio.
Fotografías de David Frutos
Este proyecto plantea la reforma de un edificio construido en 2001 para adaptarlo a nuevas necesidades funcionales, pero también para mejorar su eficiencia energética, su confort térmico y en general la calidad estancia de las personas que trabajan en él. Las estrategias relativas a la construcción sostenible se pueden resumir en estos puntos:
- Integración de una instalación fotovoltaica de 100 kW que, además de producir electricidad suficiente para cubrir la demanda del edificio, filtra la radiación solar y recoge el agua de lluvia.
- Gestión sostenible del agua con el objetivo de lograr un consumo cero de agua no potable, recogiendo pluviales y agua de condensación de climatización.
- Optimización del uso del sol, aprovechando la iluminación natural, pero a la vez filtrando el exceso de radiación solar para evitar sobrecalentamiento.
- Creación de un microclima en el patio interior, mediante un jardín de especies autóctonas de ecosistema mediterráneo de ribera, convirtiéndolo en el corazón bioclimático del edificio.
Fotografías de David Frutos